La izquierda a la defensiva


En Maldonado

La izquierda a la defensiva

APENAS A TRES semanas de las elecciones, Óscar de los Santos, uno de los candidatos del EP-FA a la Intendencia de Maldonado, está aprendiendo a la fuerza los aspectos desagradables de estar en la cresta de la ola. Desde que varias encuestas 10 ubicaran en el primer lugar en las chances electorales -aunque seguido muy de cerca por -Darío Pérez, su contrincante en la interna-, el fuego se ha concentrado sobre su figura y ha tenido que cubrir varios frentes abiertos en su contra. Hasta los blancos por una vez han dejado en segundo plano sus críticas a Pérez, a quien durante casi una década denostaron con ardor, para dedicarse al pintor de obra de San Carlos.
Si bien no se puede caer en el error de creer que el ascenso de De los Santos se debe simplemente a una estrategia del Partido Nacional (PN) para reducir las chances del “favorito” Pérez, lo cierto es que los últimos ataques de los blancos han fortalecido las cartas ganadoras de la izquierda, esto es, la presencia de dos dirigentes de fuerte peso electoral.
Pero a pesar de esta situación, de la diferencia de 11 puntos que el EP-FA le sacó a los blancos en octubre y de la supremacía que hasta ahora estaban mostrando las encuestas, no todo el campo es de orégano para la izquierda. En las últimas semanas se ha notado un cambio en el ambiente, favorable al PN, que con una estrategia electoral muy agresiva se ha adueñado de la iniciativa política y está obligando al EP-FA a actuar a la defensiva. A pesar de todos los problemas sociales que hay en el departamento y de las acusaciones de corrupción y clientelismo, la izquierda no ha logrado salir del atolladero en que está metida por el tema de las excepciones edilicias. La acusación, repetida mil veces en cada radio y en cada barrio, de que el EP-FA está en contra de la creación de fuentes de trabajo puede resultar burda o risible para algunos, pero sin embargo produce su efecto. La desocupación es alta, la temporada no fue muy buena y no desparramó beneficios como otros años, por lo que hay amplios sectores muy sensibles al tema del trabajo. Los blancos son conscientes de esto y lo dicen abiertamente: esperan ganar las elecciones con este caballito de batalla. Y se emplean a fondo. No en vano el senador Francisco Gallinal dijo que para los blancos Maldonado era “la madre de todas las batallas “.
Lo cierto es que mientras los blancos adquieren confianza y empiezan a mostrar un ánimo ganador, la izquierda no sólo no logra tomar la iniciativa sino que se complica con rencillas internas, sin advertir que su rival recupera terreno a ojos vistas.
Consecuencia de la proyección que las encuestas le dan desde hace un par de meses, para bien o para mal las acciones de De los Santos tienen una repercusión mediática importante. El reciente viaje a Buenos Aires donde se entrevistó -entre otros- con el gobernador de Buenos Aires, Felipe Sola, levantó la ira de los blancos que hasta llevaron el asunto al Parlamento, aunque sin suerte. En un contexto de amplias coincidencias, el político argentino remató su conferencia de prensa con un “yo espero que (De los Santos) sea el futuro intendente de Maldonado”.
Por otro lado, el notorio y público apoyo que Juan Carlos López Mena está dando a la candidatura de De los Santos (el empresario organizó el viaje a Buenos Aires, trasladó a los periodistas y concretó la agenda) comenzó a ser criticado por Pérez y otros candidatos de su sublema, ya no en voz baja sino en actos públicos. Pérez repitió hasta el cansancio que no acepta dinero de empresarios porque eso crea compromisos, y en un acto barrial llegó a pedir
el voto específicamente “para este sublema”, porque “somos los únicos que tenemos las manos limpias “. De los Santos no contestó estas alusiones pero los blancos, ni lerdos ni perezosos, vieron la veta y, con fingida inocencia, salieron a mostrar su preocupación por la influencia que podría tener el empresario en un gobierno municipal frenteamplista. El propio De los Santos recordó entonces que López Mena organizó para Antía, hace algunos años, una reunión con empresarios argentinos en la embajada uruguaya en Buenos Aires. Las críticas de unos y otros llevaron finalmente al diputado a organizar una conferencia de prensa en la cual hizo pública su declaración jurada de bienes y una nota elevada al Banco Central, al Banco República y a la Junta Económica Financiera pidiendo el levantamiento permanente del secreto bancario sobre su persona para cualquier interesado. De los Santos entregó documentos a los periodistas con la información de su patrimonio: un Chevette del 89, una casa de 50 metros cuadrados en San Carlos, un terreno en el populoso barrio Maldonado Nuevo y una cuenta con 300 dólares.
Como se ve, el escenario no es precisamente el que la izquierda necesita para consolidar la ventaja que obtuvo en octubre. Un artículo publicado en El País (miércoles 13) señala que para Factum Maldonado está entre los departamentos donde es “más difícil de saber” si ganará un partido u otro dada la paridad de las preferencias de los votantes. No parece, en principio, que el grueso de la dirigencia del EP-FA local haya tomado conciencia de que si bien la mayoría de las encuestas lo siguen ubicando primero, la derrota tampoco es un escenario imposible. Y que si esto sucede será un duro golpe para el proyecto progresista nacional y una catástrofe para la izquierda departamental.