El intendente Óscar de los Santos (un pintor de obra de la Alianza Progresista) abandonó la tradición uruguaya del avance gradual al anunciar una serie de medidas de corte radical, por lo menos en el reordenamiento del caos funcionarial que padece la comuna.
Entre sus primeras medidas está el cese –así, sin cortapisas– de todos los funcionarios contratados durante los últimos cinco años con sueldos superiores a 15 mil pesos. Eso no es todo: a los que ingresaron durante la última administración cuyos salarios no llegan a ese monto se les respetará el puesto de trabajo, pero cuando venzan sus contratos (de tres meses) serán retomados en el primer grado del escalafón funcional, el de menor sueldo.
De los Santos lo explicó a BRECHA con convicción: “Los cargos de confianza están en el grado C y se van con cada administración. Pero nos encontramos que en los últimos años entró gente en el grado 11 I (inspectores) o en un escalafón de director como grado 10, o cosas así. Hay alrededor de 140 funcionarios de confianza encubiertos, con sueldos altos, que entraron en los últimos cinco años disfrazados de funcionarios de carrera. Esos quedan cesantes. Si eso nos genera dificultades, las resolveremos”.
Durante la gestión del blanco Enrique Antía los tres grados más altos de cada uno de los diferentes escalafones fueron llenados por dirigentes blancos, topeando la carrera de los funcionarios en forma ilegal. Además de la flagrante injusticia que significaba para aquellos que han trabajado por dos, tres o cuatro décadas, y veían que los cargos que les correspondían eran ocupados por paracaidistas, sin duda iba a significar una verdadera quinta columna para el gobierno de izquierda. Los cargos de confianza de la nueva administración son 54, por lo que el ahorro será significativo.
El desmantelamiento de la estructura clientelística montada en 15 años de gobiernos blancos incluye el registro de viviendas de soluciones municipales. Si se detectan propietarios que tengan más de una vivienda, perderán el derecho a ésta, y se controlará el pago de las cuotas, creándose un plan de refinanciación para los actuales deudores.
Para dar el ejemplo, el nuevo intendente ganará menos de la mitad de lo que ganaba el anterior. De los Santos cobrará lo que dispuso el EP-FA: el sueldo de un senador más un 30 por ciento de gastos de representación. Dado que el salario ya fue fijado por la Junta Departamental y no se puede bajar, los 90 mil pesos de diferencia serán volcados a la construcción de una sede para la Universidad de la República.
Hay otras medidas de gran importancia que también traerán polémica. Por ejemplo, la comuna pondrá en un predio municipal servicios mínimos (agua y calles abiertas) para que, según De los Santos, “los que lleguen se vayan orientando a ese lugar, donde habrá un grupo interdisciplinario trabajando”.
Se trata de evitar la creación de asentamientos irregulares desordenados. “Es una situación absolutamente transitoria, y no van a poder estar más de 90 días. Si la gente consigue trabajo, se irá para alquilar en otro lado, y si no se tendrán que ir igual. Pero el problema es que no podemos permitir que la gente llegue y se asiente en cualquier lado. Queremos dar un marco de contención: habrá allí asistentes sociales y un grupo interdisciplinario. Se controlará si tienen cédula, si los niños van a la escuela, si están cubiertos por el Plan de Emergencia”, explicó.
También habrá una batería de medidas importantes en las áreas de urbanismo, transporte, políticas sociales, descentralización, salud, cultura y turismo. Los dos primeros proyectos de decretos que enviará el nuevo gobierno a la Junta, la semana que viene, serán un pedido de anuencia para un préstamo por 20 millones de dólares y un plan de refinanciación de deudas de los tributos.
Como los sueldos se pagarán dentro de tres semanas, a la nueva administración le va la vida en conseguir estos 20 millones, ya que los blancos no dejaron ni un peso en la caja. Con este crédito y políticas de ahorro se buscará llegar hasta enero, cuando la recaudación comienza a activarse gracias a la actividad turística.